miércoles, 22 de mayo de 2013

Un Rostro Hermoso



Quizá este mundo nos ofrezca cosas espectaculares, pero no hay nada mejor que la felicidad que se experimenta al entrar en la presencia de Dios y encontrarnos con su rostro.



Sal 27:7  Oye, oh Jehová, mi voz con que a ti clamo; 
 Ten misericordia de mí, y respóndeme. 
Sal 27:8  Mi corazón ha dicho de ti: Buscad mi rostro. 
 Tu rostro buscaré, oh Jehová; 
Sal 27:9  No escondas tu rostro de mí. 
 No apartes con ira a tu siervo; 
 Mi ayuda has sido. 
 No me dejes ni me desampares, Dios de mi salvación. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario